Fue en esta época del año pasado cuando empezamos a definir la visión para la tercera generación de BI y analítica. Nuestra idea era simple, que la transformación impulsada por los datos requería un nuevo enfoque democratizado de la forma en que generamos valor a partir de nuestros datos. Posteriormente, en septiembre, publicamos nuestro whitepaper que explicaba cómo la democratización de los datos, la inteligencia aumentada y la analítica incorporada en todas partes son los requisitos previos para ir más allá de los enfoques centralizados y posteriormente descentralizados que existían antes.
Casi un año después, esas ideas son ahora más reales que una visión de futuro y representan la realidad del mundo basado en datos que ocupamos. Hay tres razones por las que creo que esto es cierto. El primero es la entrega de la tecnología de habilitación por parte de Qlik. El segundo es el consumo de esta tecnología por parte de nuestros clientes. En tercer lugar, lo que está sucediendo en el mercado que nos rodea.
Me referiré a los dos primeros mirando hacia atrás a nuestro evento global de clientes en mayo. En la presentación del producto, nuestro equipo describió cómo Qlik ha cumplido no sólo con cada uno de los requisitos previos de los pilares de la 3ª generación, sino cómo lo hemos apoyado con un enfoque arquitectónico que permite una verdadera plataforma multi-nube. Nuestra integración de Attunity, ahora una división de Qlik, junto con nuestros activos de datos existentes permite una plataforma de integración de datos que hace que la democratización de los datos no sólo sea posible, sino fácilmente alcanzable para nuestros clientes. Nuestro enfoque único de la inteligencia aumentada también está ahora representado en capacidades muy reales y disponibles de forma general en Qlik Sense, demostrado por algunas de las demostraciones más atractivas que he visto en una conferencia de analítica, nunca antes. Por último, nuestra innovación con nuestra plataforma nos permite ser líderes en la nube y permite a los clientes construir y ejecutar análisis para cualquier caso de uso, dondequiera que lo deseen o se les requiera. En cada caso mostramos cómo estas innovaciones clave están impulsando la transformación para nuestros clientes en este momento.
Sin embargo, es lo que está sucediendo en el mercado que nos rodea lo que hace que esto sea aún más relevante. La evolución de la analítica ha sido impulsada por muchas cosas. Quizás el más importante hasta hoy fue la serie de adquisiciones de 2007 por parte de IBM, SAP y Oracle que acabó con la primera generación de inteligencia de negocio. Si bien hubo, y tal vez siempre habrá algún atractivo para el comprador por un enfoque de un solo proveedor, esas adquisiciones sirvieron primero como una admisión de que lo que había pasado antes había fracasado. Posteriormente, los posibles compradores votaron con los pies y la segunda generación -mucho más análisis que la inteligencia de negocio centrada en los informes- impulsó el crecimiento de Qlik y de otras plataformas modernas.
Todas las cosas buenas llegan a su fin, incluso ahora que predijimos la segunda generación de BI. Esta vez son las grandes plataformas de nube las que están asestando el golpe mortal, ya que utilizan el análisis como una forma de consolidar la propiedad de los datos de los clientes. Al igual que el enfoque de pila única que se aplicaba antes, es probable que este enfoque tampoco ofrezca el valor que los clientes esperan. El almacenamiento de datos y el bloqueo de la nube serán en última instancia inaceptables por razones de coste y de cumplimiento. La integración y el aprovechamiento de las sinergias sofocarán a la comunidad y a la innovación. En Qlik sólo podemos ser responsables de nuestro propio destino. El análisis democratizado de tercera generación representa la forma en que, con una arquitectura independiente de datos y de nube autocontenida, seguiremos ofreciendo el valor y los resultados empresariales que esperan nuestros clientes. Lo que estamos presenciando ahora en esta ronda de consolidación de 2019 acelera la importancia de esta estrategia. Nuestra visión de la tercera generación de analíticos parece ahora aún más adecuada, más oportuna y, desde un punto de vista personal, más satisfactoria. Sólo recuerda, lo escuchaste aquí primero.
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